El consultor para deporte motor de Red Bull, Helmut Marko, menciona que el equipo podría salirse de la Fórmula 1 después de 2020 si la Fórmula Uno no asegura a un proveedor de motores independiente antes de finalizar este año.
La F1 realizó recientemente un acuerdo para motores más económicos y más ruidosos para 2021 para reemplazar los poco populares motores híbridos V6 turbo de 1.6 litros introducidos en 2014.
El acuerdo no menciona específicamente a un proveedor de motores independiente, algo que le daría a los equipos la oportunidad de obtener motores que no podrían obtener sin tener que acudir a uno de los fabricantes existentes de F1. Marko insinuó que el encontrar a uno antes de terminar 2017 podría determinar el futuro de F1 más allá de 2020.
“A mas tardar 2021 debe entrar un proveedor de motores independiente en la F1”, menciono Marko al sitio web oficial de la F1.
“Estamos hablando de un motor mucho menos sofisticado del que tenemos ahora, un motor de carreras simple. Hay suficientes compañías que podrían suministrarlo. Así que esperamos que los nuevos propietarios junto con la F1 encuentren una solución a más tardar a finales de temporada. Si eso no ocurre, nuestra permanencia en la F1 no sería algo seguro.”
En 2015, Ferrari vetó un tope de costos planeado por €12 millones para motores de F1, indicando a la FIA a buscar “motores económicos” alternativos más baratos en un intento por controlar los crecientes costos de los motores para los equipos más pequeños. A pesar de haber “Declaraciones de Interés” creíbles de fabricantes viables, la Comisión de la F1 rechazó el plan de la FIA.
Esas discusiones llegaron durante el acrimonioso rompimiento de Red Bull con el proveedor de motores, Renault, con el equipo austriaco amenazando con partir en esa ocasión si no podía encontrar una unidad de potencia competitiva para la siguiente temporada.