Rafael Nadal, poseedor de dos medallas de oro olímpicas, repitió recientemente el momento más famoso en la historia olímpica de España.
Nadal y Marc Lopez, los campeones olímpicos en dobles de 2016, tomaron arcos y flechas y se unieron al arquero Antonio Rebollo el lunes en el Estadio Olímpico de Barcelona 1992. Trajeron recuerdos del inolvidable encendido de pebetero de Rebollo para las únicas Olimpiadas llevadas a cabo en España.
Nadal está en Barcelona para el evento del ATP Tour preparándose para competir por un 10º título del Abierto de Francia del próximo mes.
Rebollo, quien ahora tiene 61 años, fue uno de los 200 arqueros considerados para encender el pebetero en 1992. Supo que lo habían escogido para dicho rol sobre otros cuatro finalistas dos horas antes del evento, de acuerdo a un perfil de NBC Olympics en 1996.
El pebetero estaría a 195 pies de distancia. Pensando en que Rebollo pudiera fallar al objetivo, los organizados le indicaron que disparara la flecha más allá de los muros del estadio. Al pasar la flecha, un técnico encendería la flama de gas natural con un control remoto.
.@RafaelNadal trying out something easier said than done…?! @ITF_Tennis @bcnopenbs @COE_es pic.twitter.com/wjAX4w9wdf
— Olympic Channel (@olympicchannel) April 27, 2017
La ilusión funcionó. La historia verdadera no fue revelada por otros 20 años.
“No hubo miedo,” Rebollo, un oriundo de Barcelona quien contrajo polio a la edad de 8 años, le contó a la NBC hace dos décadas. “Yo fui prácticamente un robot. Me enfoqué en mi posición y en llegar al objetivo. Eso fue todo… Mis sentimientos se basaron en lo que la gente describía lo vieron. Lo que sintieron, sus emociones, sus gritos. Eso fue lo que hizo que me diera cuenta de lo que realmente significaba el momento.”