Sin lugar dudas. la presencia del quarterback ha elevado las expectativas externas y el novel de confianza dentro del vestidor de los Jets
Desde el momento en que arribó en el 2019, el linebacker C.J. Mosley ha estado en una misión para cambiar el modo en que los New York Jets son percibidos alrededor de la liga, en términos de la falta de respeto por parte de los oponentes. Recuerden la derrota por paliza ante los Philadelphia Eagles en el 2021, cuando Mosley habló sobre cómo los Eagles se reían de ellos.
Esa narrativa ha cambiado, de acuerdo a Mosley, quien ahora cree que los Jets cargan un blanco sobre la espalda.
“Es exactamente lo que deseamos”, dijo el defensivo. “Queremos que la gente nos dé todo lo que tiene. Queremos ir a los estadios de otros y escuchar cada cosa que nos quieran decir, para poder callarlos cuando haya terminado el partido. Eso es lo que se va a necesitar para ganar un Super Bowl. Eso lo que se va a necesitar para crecer como equipo”.
Si la percepción de Mosley es precisa, eso se debe al quarterback Aaron Rodgers, cuya presencia ha elevado las expectativas externas y el novel de confianza dentro del vestidor de los Jets.
Siguiendo el ejemplo de Rodgers, quien habló en su conferencia de prensa de presentación acerca de sumar otro Lombardi Trophy al “solitario” del Super Bowl III en las vitrinas del equipo, nos jugadores no han sido tímidos para expresar sus opiniones con respecto al potencial del equipo. Este equipo no ha mostrado esta clase de actitud desde los días de Rex Ryan. Incluso, el guardia de bajo perfil Laken Tomlinson se ha unido a la diversión señalando, “Si somos bendecidos con algo de salud este año, vamos a ser un equipo al que hay que temer”.
¿Puede un jugador en un vestidor de 90 hombres realmente hacer tanta diferencia? Esa pregunta se hizo a un par de jugadores, y ambos respondieron con una sonrisa y un rápido “Sí”.
Mosley no tiene problema con la recién descubierta confianza. Después de todo, si los Jets no creen en sí mismos, ¿cómo pueden esperar que el resto de los clubes los tomen en serio?