La rivalidad entre ambas selecciones es de antaño, pero antes los mexicanos doblegaban al rival. Hoy en día, las cosas lucen muy parejas, aunque mejor para los estadounidenses
Los cambios recientes de entrenadores en ambas escuadras integraron a una figura de alto perfil como Mauricio Pochettino en Estados Unidos, al tiempo que México apostó por alguien conocido y un verdadero veterano como Javier Aguirre, por lo que ambos programas tienen la oportunidad de alcanzar una meta importante temprano cuando se encuentren el martes.
En el pasado han quedado los estrategas que recientemente fallaron en generar buenas impresiones en la Copa América, por lo que ahora será el espectáculo de Aguirre y Pochettino con los gigantes de la Concacaf, quienes, sin duda alguna, buscarán estampar su marca en el rival.
El partido de hoy en el Estadio Akron de Guadalajara no sólo se trata de ver quién manda en la región, sino que también ofrece una oportunidad única de construir algo importante hacia el Mundial 2026 en el que ambos países serán sedes (junto con Canadá), así como el hecho que dejen en claro el camino que están construyendo.
Ambas escuadras reinician
Con el cambio de entrenadores en la selección de Estados Unidos y la selección de México se busca hacer cosas diferentes, tienen el Mundial en casa y quieren que este Mundial sea mucho mejor en todos los sentidos. Sienten que se han estancado un poquito más, sienten que a lo mejor con los jugadores que tienen tendrían que haber conseguido mejores cosas. México trayendo a un técnico que ya conoce lo que es estar ahí, que conoce bien al futbolista mexicano y que lo ha ayudado a conseguir cosas importantes. Del lado de Estados Unidos, apostando por un técnico diferente, un técnico internacional, un técnico con una trayectoria como jugador y como técnico en Europa importante, buscando ese plus con los jugadores.
En Estados Unidos, se apostó por la continuidad y la paciencia, eso sirvió para encaramarse en la cima de la Concacaf, pero no para trascender más allá de la zona que engloba Norteamérica y el Caribe. Eso provocó un replanteamiento con Pochettino.
Al igual que México, Estados Unidos ha tenido pocos puntos positivos que subrayar desde el Mundial del 2002. Con la meta de demostrar que no estamos hablando de un pez grande en el estanque que representa la Concacaf, la selección de las barras y las estrellas ha sufrido contra la élite, algo que quedó en evidencia durante la desastrosa participación y despedida durante el verano en la Copa América. Un par de compromisos amistosos sin victoria previo a ese torneo dejaba entrever lo que deparaba su futuro.
Fortalezas y debilidades de ambos
La mayor fortaleza es la llegada de Javier Aguirre y Rafael Márquez. Ahora los futbolistas saben que se terminó el carnaval y que habrá disciplina, además de que se espera que prevalezca la justicia deportiva y sean convocados los mejores, no los que ‘sugieran’ los directivos.
En cuanto a las debilidades, el momento que está viviendo México que, de no obtener buenos resultados, no ayuda mucho a la confianza. Hay que recuperar la confianza en los jugadores, recuperar los buenos resultados para que la afición que vaya al estadio se meta rápidamente, se meta con el equipo y pueda venir también ese apoyo de la afición hacia la cancha, que creo que es algo que es importante, que se ha perdido, que la afición se ha alejado de los partidos de la selección y el equipo lo necesita.
México tiene como principal fortaleza su defensa. César Montes y Johan Vásquez han hecho el proceso desde la categoría Sub-23, en la que ganaron una medalla de bronce y han sido la línea más regular en los últimos años. La principal debilidad de México se encuentra en el otro extremo de la cancha, la delantera.
Con Estados Unidos hay poca evidencia después de solo un partido, pero claro que hubo mucho que disfrutar, particularmente de lo fluido que se vio el ataque de Estados Unidos que contó con un jugador peligroso como Christian Pulisic, quien tomó la batuta desde la banda. Brenden Aaronson también tuvo algunos toques de magia, al igual que los anotadores Yunus Munsah y Ricardo Pepi, a quienes también debemos darles crédito.
Enfocándonos en las debilidades, quizá a Estados Unidos le lleve un poco de tiempo afinar su transición defensiva. Pochettino y sus dirigidos tuvieron suerte al no permitir gol en su primer partido juntos contra Panamá ya que el rival tuvo algunas ocasiones y puso en predicamentos al sector defensivo.
¿Qué equipo tiene más que perder en este momento?
Creemos que México tiene mucho más que perder, porque los dos partidos que va a tener son en México. Pocas veces se han jugado partidos amistosos en México contra Estados Unidos. El último amistoso fue en el Estadio Azteca y México lo perdió, así que sería importante, bajo el mando de Javier Aguirre, hacer un buen partido y generar una conexión de nueva cuenta con la afición. Un buen triunfo contra Estados Unidos limaría las asperezas.
Estados Unidos se encuentra en el inicio de un proceso, en el que Mauricio Pochettino tendrá más allá de la fecha FIFA de octubre para trabajar las carencias del equipo y apenas conocerá a sus jugadores. Por su parte, Javier ‘Vasco’ Aguirre necesita pronto ganar adeptos, debido a que México tiene cinco años sin ganarle al equipo de las Barras y las Estrellas, uno de los factores que ha provocado el abandono por parte de sus aficionados.
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